Un añito juntos

Este es Pedrito.

Llegó hace más o menos un año a casa de la abuela. Llevaba un par de días dando vueltas por la carretera y nadie le hacia caso, hasta que se encontró esta puerta abierta y se metió hasta la cocina, jijiji. Como Pedro por su casa, de ahí el nombre.

Los abuelos ya no querían más gatos, que eran 15 por aquella época, pero él se los ganó enseguida. Les daba besitos y se les abrazaba al cuello y siempre intentaba dormir encima de las piernas del abuelito.

Los gatos lo aceptaron muy bien, como era un cachorro aún y había más bebitos por aquí enseguida se integró y se convirtió en inseparable de Mani, Lía y Diego.

A mami le dijeron que le tenían un regalo de reyes atrasado...un gato naranja como él que ella siempre ha querido. Los papis tampoco querían que se quedara, pensaban que ya eran muchos, pero en cuanto lo vieron se enamoraros de lo amoroso que era.

En el veterinario siempre se ha portado muy bien. El día de las vacunas que estuvo más de 2 horas en la clínica se sentó en el mostrador y se abrazaba a todos los que pasaban a pagar...

Nunca se ha vuelto a hablar de darlo en adopción. Ya es tan de la familia como si hubiera nacido aquí.

Esperamos que pase muchos años más junto a nosotros.